Debido a su facilidad de instalación, la práctica habitual es instalar materiales de zarpeo/gunitado como protección de la bobina de los hornos de inducción.

La actualización del diseño de los hornos incluyendo sistemas push-out (tapón empujador) que facilitan la extracción del revestimiento durante su demolición y minimizan la generación de polvo durante el proceso, pero que afectan al revestimiento de la bobina erosionando el mismo, han supuesto nuevas necesidades de reparación por desgaste en esta zona de los hornos.

Frente a estas nuevas exigencias, RSI ha adaptado la tecnología utilizada habitualmente en los hornos de frecuencia de red, instalando un hormigón autocolable como protección de la bobina.

De esta forma, conseguimos:
– Minimizar el agua de mezcla del material
– Incrementar las propiedades mecánicas
– Minimizar la aparición de grietas durante el secado
– Alargar la vida útil del revestimiento
– Reducir los tiempos por paradas de reparación

¡Un nuevo concepto de revestimiento con mejores prestaciones y que ofrece mayor seguridad a los usuarios de los hornos!